La realidad de mi tiempo se llena de principios de incertidumbre, a cada paso de mi camino y de mi espera.
Esperando la vida te la encuentras de repente en cada esquina y te preguntas si era hoy cuando los colores te pintaban el resto del camino.
Es entonces cuando detienes el paso y es mejor vaciar el vaso para acordarte de que beber no sacia la sed de llegar a ser.
Si eres pez en el océano de querer ganar, y esta vez, puede que también de perder, puede que estes a merced del agua y no de tu sed, puede que muera si aventuro al animal fuera de donde aprendió él, el mismo que hoy en este amanecer se queda saciado ,y sin querer, de ganas de volar, quiera no ser siempre pez.
Esperando la vida te la encuentras de repente en cada esquina y te preguntas si era hoy cuando los colores te pintaban el resto del camino.
Es entonces cuando detienes el paso y es mejor vaciar el vaso para acordarte de que beber no sacia la sed de llegar a ser.
Si eres pez en el océano de querer ganar, y esta vez, puede que también de perder, puede que estes a merced del agua y no de tu sed, puede que muera si aventuro al animal fuera de donde aprendió él, el mismo que hoy en este amanecer se queda saciado ,y sin querer, de ganas de volar, quiera no ser siempre pez.