las ventanas cerradas de tu hogar no niegan el teatro que representa fuera de ellas una vida que no es tuya, pero en la que tarde o temprano, tendras que actuar para hacer en ese guión establecido una improvisación de tu camino.
Si te restas en tu destino compañero, tu casa solo ocultará el proceso, pero un día y los siguientes, llamará a tu puerta el miedo.
Y escondido en tu espacio hipotecado seras complice de su espectaculo, y actor o espectador seras esclavo de su guión condenado, hablaras como ellos te han enseñado, te haras hombre perdido entre...
