viernes, diciembre 02, 2005

con ella...


Ella es baile en mi conciencia por no ser nadie y ser todo,
una vez o dos a la semana.
Quiero ser de nuevo el segundo hielo de tu copa, el hambre de las cinco de la mañana para encontrar algo nuevo esta vez, condena de hombre.
Busco el destino de mi ombligo cada noche.
Voy a hacerme un hueco en la percepción mientras busco una limpieza, mientras tanteo al miedo y a las alas de princesa que quieren hacerme volar en un cielo que no es mío.
Busco el sueño que he escondido en las rayas de tus bragas, busco en ti o en ella donde perder la mirada.
Ser valiente de fe y de un poco nada, que ya es tarde para jugar a que todavía es pronto para acabar mi baile y empezar la guardia.
Si no hay error en la puerta de entrada hoy te escupo el castigo de no tener coartada en esta noche de salimos porque si.
Hoy te entrego mi juego y te juego mi baile entre las voces y un mal comienzo, te dejo colgado el sueño y te despierto si quieres tener un beso, si quieres abrazarme bajo la lluvia y verme sin poner espejos.
Llegan tarde las naves de hacer colores en las nubes, que cubren el espacio que queda entre los edificios, que miramos por no mirarnos a la cara. Dejarnos en la almohada un te espero sin reparos, un
- tranquila compañera -, un encuentro entre tus brazos.