sábado, diciembre 03, 2005

una sensación aquí dentro…


Se aleja el encuentro de la tierra con este mi destino escrito, las coincidencias del perdedor y el hueco de su buena obra son los dos jueces que levantaran la sentencia sobre lo que esperas de mi y nunca encontraras.
Me llama la llama y quema lo poco que queda de aquella que es la ilusión del diccionario, la ultima entrega de los fascículos de hacer una vida mejor.
Me quedo en la parada, me vuelvo de nuevo hasta la última vez y dejo de creer porque nada parece real.
Así queda una condena empapada de agua.
Lleva un poco de aquello de lo que tu y tu ni tenias pensado y se acaba por decidir….es lo que tanto esperabas, eso que tanto estuviste a punto de vender por tu corazón.
Suelo tener entre los ojos un pensamiento, solo uno, eso de ser un poco más de lo que soy, cada día, cada minuto cada golpe de sangre en el pecho.
Tienes más de lo que de lo que imaginas en el alma, tienes más de lo que te dijeron desde el principio en los peros que nunca llegaste a preguntar.
Hoy es el día.
Llévame hasta el suelo para ver en la tierra tu condena, tus ganas de hacer pos ser, tus sueños por cumplir y tus tareas por cumplir, entre las obligaciones y tus decisiones, entre tus deberes y tu pertenencia de eso desde lo que ha partido tu saber.