viernes, diciembre 09, 2005

- Pero yo sigo...


sin ganas de dormir el tedio porque me aleja de la realidad, quiero hacerlo un peinado que llevo por un tiempo, una chaqueta de temporada, un triste momento.
Creo que sigo esperando, sin querer, a que salga la vida de repente, de algún rincón, de algún espejo.
Con ganas de mirarte el pecho y bailarte la cintura con las manos, follarte el cuerpo y amar cada una de tus palabras.
Gírame el deseo hacia donde tú quieras que yo voy detrás con las penas abiertas, que la sangre marque el camino de vuelta a casa, que al menos aquí he conseguido sacar al sol y hacer de la noche borracheras y verbenas, camas y entrepiernas por donde paseo sin hacer promesas.
Niña de los ojos de tierra y el agua cansada de hacer un río de ida y vuelta al lugar donde los besos se cobran y ya no se roban.
Jugando a ser el hombre que hace de tu vida algo diferente vuelvo a encontrar una manera de perder la cabeza entre sonrisas y una mirada nueva de ven y cógeme el miedo. Soy el señor que quiere hacerte mujer aunque hace tiempo que lo seas, aunque esta noche creas que nadie nuevo puede ser un poco más de lo que siempre has querido de él. -