sábado, enero 07, 2006

de repente


Se me ocurre pensar en algo de repente, como si viene el sol sin que lo espere.

Llega hasta mi una oscura penitencia y parece que ya no quedan huecos entre el hemisferio derecho del cerebro y el corazón entero que perece en esta condena. Pensando en negro llego mejor al gris porque prefiero cogerte a ti el blanco.

Así, desde este lado de la verdad puedo pensar de repente que…

…algo escapa de los brazos en la acción mientras estoy aquí, entre la gente.

Soy concreto en el espacio, soy un trozo de tiempo, dirijo las palabras aunque a veces, de repente, también las pienso.

Creo que es hora de creer un poco mas en que puedo hacerlo, eso de creer lleva caminito de ser, eso mismo, ser.

Así, dirijo las palabras a jugar con su razón, que por definición me llevan hasta este lado de la verdad.

No quiero entrar en ninguna de sus salas señores, me disculpan y me quedo haciendo lo que se me ocurra de repente, como si viene el sol sin que lo espere, lo que me salga de los huecos que quedan entre hemisferio derecho del cerebro y el corazón entero.

Si me dejo, se cuelan esas absurdas cosas que dicen ustedes por entre los huecos y luego cuando me de por hacer, de repente, esté siendo yo también absurdo.