martes, noviembre 07, 2006

jugador




El amante del juego ama el placer de jugar, ganar no es la meta, es uno más de los detalles que te hacen amar el juego.

Jugador y amante peligran en el miedo de no llegar hasta un sueño demasiado lejano, hasta un camino que no está en tu paso y que cuando llegues, si llegas, tú no seras el mismo.

Camina el amante jugando con el mundo mientras gana y pierde al miedo, ya no es el mismo en su paso cuando ama cada sueño y se lo juega ha placer.

Se juega la vida y se ama por ser.