HUELGA QUE la errada imagen adquirida desde fuera de esta condena se ha frotado en un ayer incandescente contra mi estrategia habitada en un somriure.
Hasta que una fragua clandestina brote anónima de madrugada y se conecte con mis formas de chupar caladas al cigarro y se deje pausar con ellas en su tempo.