a través

 

 

Y es siempre este filtro fermentado el que me acompaña.

De todos los colores, de cualquier modo a mi inconsciente incitado, siempre me empujo a caminar a un delicioso y atrevido paso.

Uno acaba por rendirse al profundo y terrible baile coloreado, dejándome llevar a la dimensión que reposa en la barrica de mi yo repleto de vicio y cadencia de placer autoencargado.

Hoy me has vuelto a mirar en ese repetido instante, una vez más, sabiendo hace horas que hoy iba a dejar que se me llenaran los ojos y los actos de camino planeado hasta mi gemido.

Tantas veces me he mirado este perfil de copa y me he sentido victorioso que hoy, una vez más, me siento cómodo y extrañamente feliz por este repetido acto.   

Se asoma el colorido contraste a contraluz de nuestro nublado tiempo. Simbolismo que enaltece nuestra igualdad en la variedad de la diferencia.

Me veo en este baile a colorido contraluz, templando el que se que es final de ceremonia, me recreo en la mirada y el proyectar mi yo contra la carne deseada.

Quiero empujar en la profundidad de mi reojo al quiero y no quiero, sabiendo que no hay arte, solo contraluz de mi quererme vicio que va y vuelve de nuevo.

La veo repetida en cada escena buscada, en cada golpe que repite una misma pero variada coordenada 

carretera

 

 

¿DóNDE vas?

 Carita al horizonte infinito y voluntarioso camino bajo mi selecto adjuntar archivo.

Tengo prisa lenta y paciencia de sobra cuando se trata de bailarme este vicio, hago planes para mantener eterno el juego de mi yo espectador activo.

Te sigo.

Te dejo conquistarme en esta evocación pactada ente yo y yo.



llama

...

 

Ahí está mi llama, candela a este mi fuego imparable y retorcido.

Arde dentro de ese yo que guardo entre rejas, calentando el abismal amanecer que siempre quiero dejar llegar para meterlo aquí conmigo.

Tengo siempre tantas ganas de quemarme.

La llama baila y quema a su voluntad todos mis planes de ser bueno, todo atisbo de bailar al paso.

Tengo tanto fuego que controlar aquí dentro que amo cada pequeño y lento quemarme.

TIRA Y EMPUJA

TIRA Y EMPUJA este estruendo que es mi tender hacia el malvado abismo de mi duda infinita, que me aleja de la locura de mis certezas, que me vuelve cuerdo pero peligroso.

No me canso de mirar tus mil caras seductoras, tu hambre que me mira a cámara mientras hago mis cosas, mi locura en secreto de persiana bajada.

 



verde (bis)

Y vuelve mi verde en una selección de archivo intencionada,

la tendencia hacia el goce.

entrada

 

 

Ensoñarme con volver 

rebañeando

Latitud de las ondas que platican con las invitadas a este bailar palabras que no entiendo.
La esperanza de SER vicioso y cuerdo caminante.

azul farola a una cima

Travesia al valle herido donde guardas los estupidos sucesos de mi eterno pasado contigo, con este azulado cielo despejado, pocas nubes.

Levanto mi vuelo apalabrado con la pena que descansa en la cuneta de mi proyecto de ser al menos, de ser consciente de mi, de yo.

De tu árbol y cadencia estroboscópica al mirarme hacia el futuro encadenado de elementos, sucesos y factores de mi previsible historia.

El azar se eterniza en mi vicio geográfico, en mi historia registrada en este infinito teclear de letras. 

rojo

Cerrojo a los planes irreales trazados sobre mi ego incandescente.

Adoro bailarme.

estática letra

 

 

La tendencia de este dejar el fin de año me lleva a imaginar un escualo buceando mi desidia, a mi caricia al tiempo que pude haber conquistado.
 Es un cero a mi izquierda prometida.

Lo esperado en la derrota es y ha sido este trozo de acantilado que me encierra en perspectiva , que me hace fugitivo de mi propia caída.

Se juega este a tiempo y este a trozos que descuelgo de mi vida.

Tiempo, espera y caricias.



horizontes de mi barrio personal

Amanece y tú me miras y te perfilas a la cámara que me ofrece tu quererme infinito.

Perfilando azoteas me proyecto un teclear que relate mis ganas de hacer verdad esta simulación enlazada.

 No puedo dejar de mirar lo que podría ser mi yo entre tus labios, seas quien seas solo yo, tú y mis ganas de permanecer en ti, en tú.

 

Alego tiempo a la espera de tú abrazo y tu caricia, alego solo mis letras concedidas por la noche. Yo.



a media tarde

Se ladea el atrapar este tintineo de placer tempranero.

 Y es que me gusta tanto el verte hambrienta con mi carne.

 Lejos de dejarlo te estremeces en el baile y contorneo de tus curvas que me agarran el jadeo.

Me vuelven loco tus colores y tus poses de niña mala, ese mirarme deseando que no termine nunca.

Agárrame a la entrada del baile que yo te espero sin mesura.

 

abandono

 

aPEADERO fantasma de un invierno nevado y abandonado por desidia...



tarde

ATArDECER

desde mi captura de paseo gratuito por el antiguo barrio, camino de algun recodo penitente,

carantoña a este amenecerme y este quererme demasiado.

se dobla al viento

No puedo ir a dos manos en estas ganas de desdoblarme la mirada perdida de mi dejarme simular la utopía, de mi eterno hambriento empujar y empujar contra jadeo envenenando amaneceres .

Sopla y traga saboreando el tiempo que se alarga en este dejarme al viento.

 

 

En la acera me volvi a encontrar una...

 

 

La perfilada mirada contra las cumbres aún por conquistar me dejan en un que pensarme interesado en la posible e infinita conquista por hacer o esperando.

La terrible acartonada esfera que acorrala mi espera se acaba por abrir al atardecer de un gesto tocando mi espesa barba.



perfil costero

aLejar los horizontes por deseo en una selección infinita de las olas que entran y rompen contra acantilados y rocas y más allá.

Te acepto el doblaje de esta intención conquistadora y kamikaze contra las rutinas formas que se pasean por mi realidad sobreactuada.

Te veo desde este hambre a contra nalga, a golpe de muerdo y mano que te agarra mientras posas descarada y seductora.

La profundidad de un gesto dedo me provoca en la distancia , y te sacas del deseo un quererme penetrarte a tu manera, a tu cadencia mojada.

 



figurante

Me figuro que estando de cobre pintado a la puerta de tu casa de campo la eternidad se hace más amena, por lo de estar al aire libre, por esta pose de músico solitario.

 Me figuro sonriente.

Los días que luce el sol me azulo a tu mirarme, me dejo regalarme de cumplidos de turistas y vecinas, me dejo reflejar de más por la luz del mediodía.

Hago trampas y me invento un nuevo complacerme de más y de todo o nada, de no ir a medias con mis excesos. La cantinela de este  remirarme constante se aparece y se subleva contra mi última buena racha, contra mis buenas dinámicas.

el león



EL LIMBO a la espera de un soplido que no llega, deseando romper la armonía natura de este aura en flor y planta y vegetal y diente de león metafora.

 Lo bailo y lo escribo en este espacio que se agrieta bajo mis letras tecleadas en verso libre, limbo abierto que jadea y jadea hasta saciar el hambre infinita de este yo extraterrestre.

 

Limbo de placer infinto que dejo suspendido en un minuto, y solo quiero eternizarlo y volver a empezar,  y seguir dejando pasar el tiempo mientras cabalgo sin descanso por esta intención conquistadora.

 

La estrategia se rinde ante esta hambre de mi incasdecente travesura consciente. Ahora es el momento de empujarla hacia el yo que no recula, que no claudica ante los juicos que latentes en el aire acusan mi compasión heredada.

 

 

tierra y mar

Hasta el acantilado se asoma el animal que me reencarna.

El hábitat de una amenazante caída no es travieso con mi encuadre oportunista,

a la tarde se caerá el sol y yo me dejaré encender por cualquier esquina, una vez más.

al fondo un horizonte

cADEncia al horizonte y a la conquista de una piel eterna y templada que se aprieta en cada baba y lengua que la baila. Se somete al verso carne de tu simulado provocar una escena traviesa que sombrea un tragar hambriento. Al otro lado del tiempo se ha quedado otro atravesar canino, enguantando el suspiro de una guerra más de carne contra carne, que se repite para repetir hasta el placer de verse repetirse contra su hambre.

 

sarta de prosa

La entrada abierta incasdecente que atraviesas como si nada, como con ganas de rendirme por tus armas de mujer eterna. Me atraviesa por la frente un pensarte sometido al empuje de tu boca y tu cantarme carnivoro.

Letanía de este descerebrado mirar a camara para empoderarte como reina de mi empezar infinito.

Déjate llevar hasta el profundo jadeo provocado de esta escena, entona una eterna vocal aprobadora de mi empuje abismal. Altercados a la orilla de los ángulos que me entregas en este amanecer viciado de ganas de pecado.

 

Condescendencia habitual y ritmo y pausa y vuelta empezar en un te hablo.



A la hora del asueto caminero me provocas a miradas tenues canibal entre luces discotequeras.  Confiesa que me miras con deseo arrabalero de esta carne que se seca a tu encuentro.
La fuerzzza soñada de tu boca atrapando la espera kamikaze de mi espera en vertigo e infinito vicio.

simbólico



La Oveja descarriada al margen del rebaño

jalando bala contra el viento

a solas en el pasto.

El rebaño no hace nada

 

Techado

eL Abismo perfilado en prespectiva de un montón de tejas se colocan a la espera kamikaze. La estruendosa conquista mañanera se queda cerca y a la vez lejos de este posarse encima de una teja sobre otra teja y otra....
La falaz terapia de mi yo que tiembla suele guiar a mi abismo que conquista los parrafos. Las terrenales miradas que se quedan al abrigo de este invierno inesperado, de este requiem atropellado entre mi quiero y no quiero.

Ayer me volé las horas a la espera de un final placer y a parte . La pose que empuja y mira a los ojos va sobrada de finales felices, de lenguetazo atrevido y aislado de las formas. 

multiple aviso sonoro

eL fARO Avista  una respuesta antigua en su poderosa imagen dominante del tiempo pasado. La Escena se atreve a acelerar la pausa y la cadencia de quien sabe llegar a un final cononocido y mojado.

Evitar y desear el choque contra la puesta en escena de este mirarme resabiado, y acelerar la tonailla que tarareo mientras amenazas mi cabo de peñas.

confusión

Mi vocación tiembla al abrigo de tu compañía mañanera.

4 en rama

El cuarteto luce posado,  la especie más común del cielo cosmopolita donde vivo. Atrapo sus perfiles en mi elección escriba de foto en post de madrugada.

Las provocaciones temblorosas se eternizan en este eterno conocernos.

 

Caseta

Subiendo la inercia que desboca el pasear mojado llega la estocada y el suspiro de un comerse de placer. Hasta el jadeo recibe un empujón y un flequillo, que  mientras tanto...

Se que sientes que se llena el placer en una caseta en las alturas, al reposo tranquilo y calmado de un descanso del paso, una conquista. Anterior a la vida te está aguardando una caricia humeante y vacilona. Joder! contraigo el espejismo en la cadencia rota de ser matemático ser. Pobre diablo en la frase hecha que se camufla en la tierra,  mientras, pausa hasta el valiente que sin querer tropieza una vez más con las letras.

es tan qué!?

Charca o agua estancada presa del riego, a la espera de un paseo cercano que la observe en su infinita lentitud. Latitud y obturación rápida contra el diafragma cerrado, se conquista la profundidad del cielo campo en este encuadre.

 La estrategia caníbal de este verde se endurece y respira andando, huestes de ceniza que atropellan a los cobardes insomnes que conquistan el silencio y la espera.
 Tiemblan y se inquietan atrapados en...

profundizar

Arrastrando hacia el abismo mi cadencia personal por los viejos raíles que me esperan fondeando en la tierra cavada.

El estrecho final en perspectiva se asoma premeditado hasta el oscuro agujero final.
 Laten entre los hierros una triste despedida del sol amaneciendo.

Que tranquila está la tierra en la piedra que apuntala el horizonte, que pereza tiene por seguir agarrada a su quehacer de escaparate.

  Agarrando el estrecho camino de tu boca con mi carne, empujo y bailo mi placer guerrero que suspira por no gritar de hambre.

 Siempre con ganas de atrapar un ai! o un oohh! o un uhh!...he perdido la cuenta de las veces que camino entre tu húmedo hasta luego.

trempo

Un descender convincente hacia una provocación,

combino estímulos a un mirar a dos lados,
dilatando el sonreír de este saberme dilatando.

Mi búsqueda se atraganta en lo que buscas, y hasta se compromete a una elección exigente.
Llega al encuentro con el clímax que he atrapado y le regalo una pausa placentera,
siempre acabo por tener esta utópika esperanza de hacer eterno este amarme tanto.

Me reitero en el disimulo, y entre las traducciones baila una prosa realidad que me sonríe.
Es en esta actitud que me representa donde está mi media risa sobreactuada,
una afirmación crecida en la postura más cachonda.

Por tirar del agravio de culparte con traición mediante,
coqueteo con tu lealtad a comerte el mundo,
es el compartir que provoca mi indecisión al ir y venir de mi yo que come.

presencia

El segundo plano de una inmensidad rocosa se aparece entre el agua evaporada del cielo y este mi suelo, se viene con la intención de darme una respuesta a este divagar que me acompaña a cada paso.

Me atrevo a plasmar su encuadre y acompañarlo de esta letra, mi pequeña conquista de hoy.
Lleno de palabras todo mi recuerdo hasta recuperar este horizonte momento guardado en jpg.
Y sin saber y sabiendo podría acabar acompañando esta recreación de letra y pensamiento.Y acabar haciéndolo insistiendo

entrega no tan urgente

Atrapa el deseo postal de una promesa personal y repetida en mi quehacer atormentado en letras. Jadea mi personalidad de vicio en segundo presente plano. La continua pelea con la imagen del yo que condena esta rutina oscura que siempre busca una forma de aparecer apalabrada en uno de estos post.

...

y habitar esta piedra amontonada al horizonte...

;

Entregado a la calaña pendenciera de este comerse un abrir y cerrar de piernas. La estancia humea a medio paso entre la carne y la mano que me agarra hambrienta. El posado de un columpio es lo más real que he atrapado a este lado de la pena, cerquita de una calada temporera.
 La juerga fue habitada de la huelga de esta red de franca gracia, que se tercia entre esta vez y aquella.

destapa

guuur
y una tenue cantada se despelleja hasta acabar trasteada en un húmedo tocar. La agarrada lengua comilona se despereza a bocados de hambre. La tarea final de esta noche vestida de uniforme salta el protocolo y se descamisa hasta las trancas, deja a un lado el manual y se vuelve loca, dejándose llevar más allá de lo formal, seduciendo el humo descarado juguetea pecho contra pecho y par y pasa y jadea, se estremece a paso de calada baba que rechupa hasta Venus.
El roce de una punta carnosa con el humo se para en silencio y revienta hasta decir - aiiiiiii...

tururú

Empujando y agarrando muslo y dejándome jadear el tragarte todo. La espenta pelvis contra nalga mientras miras y me lanzas vítores de canne y adentro entra hasta el grito rutinario más placentero.

La boca que se come el aliento desgarrado en busca de un final infinitamente feliz.

 La bandida mano estimula este entremedio placer.

perturbado

Habitado en el calor de este peso que me ahoga la postura coqueta a medio tempo, respirando a fondo de placer carnal voy planeando este rincón que me aguarda.
La esbelta pose que me regalo sonriente se aclarece en mi retina cantarera, se desvela tranquila en mi balanza medianera de frío y temblorosa queja que habitúa el perfecto acabado de la calada alquimia que se entierra entre mis pies descalzos, que se abruman en silencio a este abrigo mercenario.
La esperanza aplica la cañada terrenal de aquella fábula entrecortada que quiere ser avena y trigo y grano en molino.
La esperanza es mandinga fuerza entre habitares y esperanzas.

La terreta de este abismo.

kriptonita

kapaz de haberme furtado el espacio del que reniego, un making of carnoso que miro de reojo.
 La huella que me ofreces en la boca me agarra la lengua prohibida para vos, me espera, cogiéndote con el verbo clandestino que se come a bocados este me apetece.
Fraternal estela abigarrada de un haberte esperado detrás de mi escondite, sopresando el fue de aquel paso.

monotempo

Es la espera contraída.
Me restrego el alma perenne que me ahoga a la salida de este réquiem, buscando a ciegas un habitar de esta añoranza, un abrigo que me reine la palabra de que cada brazada que atraca mi placer.
Lo entiendo compañera, entiendo este abismo que me comes y salivas, entiendo esta boca que no alcanza al infinito que hay en tu garganta.
Estaré a tú lado a cada hueco que conquistes con la mano que se vuelve prieta cuando agarra mi

hambre azul

Huelga que en la grandiosa esfera que me espera me hayo perdido hasta las trancas. Es un beso mojado el atrezzo que jadea de placer en el plano que se come la sensualidad altiva y guerrera de tu carne. Taconea el hambre de tu boca a la espera de mi sexo incandescente entre mis piernas y el baile que me quiere morder y masticar y hasta tragar cada centímetro de carne.

Habita el aguante de una fanática palabra que se palabrea en la fuerza bruta que burla la calma. La falacia se entrevista con la profundidad de una mirada que espera al placer en la pausa y se deja en la cadencia una tregua hasta llegar al mas profundo de un placer tragado y altivo.

roce

De hasta cuando me habitan los quereles de una murga estropeada, una huelga clandestina en los abrazos que me esperan a media tarde. Guardianes sueltos de boquilla husmean entre esta historia que me precede de mi canto libertario. Vocifera mi guerrera parsimonia bandolera, mi carreta matona y pendenciera que se estruja por las horas , vive justa en los momentos que abandona en un recuerdo de tilapia pescatera o merluza madrileña en el menú del día.

Jalando derrotas me estremezco y germino a la fuerza, pues me empujas a echar raíces en tu selva, que te tengo ganas delirantes. Y la matraka que me das en la cabeza mientras voy golpeando letra y etra y letra y letra y letra y bucles sin fin que construyen este abismo controlado, y menos de ti de ti de ti ge ge e se letera ge facilona ge letre ke las fuerzas se atormenten en este tiempo proyectado en arena, a la espera de colarse hasta abajo, hasta el tiempo que cuentas, hasta el abismo que se estruja en tu boca mano mediante.

entrando

HUELGA QUE la errada imagen adquirida desde fuera de esta condena se ha frotado en un ayer incandescente contra mi estrategia habitada en un somriure. 

Hasta que una fragua clandestina brote anónima de madrugada y se conecte con mis formas de chupar caladas al cigarro y se deje pausar con ellas en su tempo.

por...

Agua y luz de una pérdida isotérmica prenda que está de moda, que lo guapo de esta buena suerte es hacerme un juego verso inacabado entre letras inconcebibles.
La juerga final de una tribu pendenciera se huele la mediana frase que aborrece tiempos y recuerdos.
Sal de ahí maldita buena estrella que todo lo meces de camino hasta arriba, haciendo tratos con la luna transiberiana viajante en vagón de literas, sigue buscando compañeros de baladas y folclore trastabillado en los colores de una historia. La fuerza sado de esta huella incandescente se entretiene a porrazos con promesas y marionetas borriqueras, suelen ser matices los colores que me hielan, suelen ser palabras y promesas haciendo caldo entre mis planes los que la final de todo este camino va y me dejan.

Observatorio Animal

El aspecto que pausa y observa mi animal al frente perfilado guarda paz y retortijón envidioso. Mi yo es contradictorio observador que capta el momento de convivencia entre nosotros que vemos siempre y ellos que nos miran pero no nos entienden nunca.
 Condicionados en una dársena jaula artificial se pausan frente a un agua estancada, soñando con que fluya o por fin haga un remolino en señal de vida o cierto movimiento que despereze la rutina.

La juerga olvidada en una mezcla libre a campo abierto se agarra a una esperanza compartida entre mi pelaje mono y las patas tiesas que al compás de estas orejas que siempre se alzan primitivas a la espera de un que pase algo

veleta

En la veleta del canto del gallo se haya el juego terciario de una guerra ya perdida por los hombres.

Acostumbrado a rutinas que se han rendido entre todas las voces que gotean por mi frente, he aprendido a dejarlas bailar en mi presente, pues se que al final caerán a mi suelo añorando un viento que las acune hasta mi infinto paso, y al golpear en mi perfil de gallo peleón al viento, mi mirada de hierro renacerá en esta veleta, preguntándose inocente y guerrera hacia donde gira hoy su destino.

jardines

Un jardín desesperado crece en flor desde la puerta donde enfoco en segundo y tercer plano, me conquista la balada rosa sobre el tejado que guarda cima al fondo.
 La desesperada luz que sobreexpone mi profundidad de campo aguanta nitidez y presencia delicada de media mañana.
Jugando con el rosa y las piedras hogareñas me dejo cautivar para escribir de esto en este ajardinado rato.

En tirereta

Guerreros figurantes en formación solemne observan en seis presencias figuradas la huida de una personalidad múltiple y soñadora, marciana y animal, saltarina de ojos saltones y dejada en manos de un druida y un agente del caos.
La presencia del macro lejano enfoca y rompe la estética conquista de las estrofas que tararean orgullosos unos hombres sedientos de diferencia.

Suele pasar que a estas horas hago un hueco en el golpe de la tecla, improviso al compás de mi cabezota pensadora el dictar de mis neuronas chapoteando en una lucidez pasajera, mientras veo al fondo como suben y bajan mis promesas con la marea.

A esta recta aleatoria le regalo una huelga, por principios, por ir cogiendo cada bocado de ese tigre figurante.

Atrapo la visión de este conquistador interplanetario que admira el caos de un payaso que se lo cuestiona todo.

Haría versos infinitos con esta voz rota, y a contratiempo dejaría entrar de nuevo mi letra conocida en aquel acorde distorsionado que acompañaba las ideas que nadie compartió en vivo.
Nadie cercano se atrevió nunca a cortarla a trozos y tragarla conmigo.

orilla de espera

Entregando al viento la caída de tu pelo te sonríes contra la arena que acaricia tus pies.
Una tregua animal cómplice.
Tierra y arena desarmada bajo los pies que esperan a que te muevas para hacer otra huella.
Y que el perro de repente salga tras el trazo de tu intención de escapada. Así lo dejas correr tras una nada prometida por un gesto juguetón e inocente y condescendiente con la raza que lo ha hecho ser tu fiel compañero, atento y de orejas pendientes, a la espera de salir en cualquier batalla imaginaria que le provoques con tu pelo al viento.

buscando calas

La ventanilla que me regala una costa gratuita deja al fondo una cala que se asoma temblorosa entre la roca y el matojo, a la espera de una marea que la borde entre las rocas, aguardando una palabra o una estrofa perfecta pero sin estribillo, una casi canción caminera de las que regalan una risa cómplice.
Me juego la huella del siguiente paso a que me fuerzo la voz en el tarareo de esta letra por descubrir.
Actuando en la cuerda del la, me rasgo acordes contra el mar, y voy bordeando costa arriba por la nueva letra que espera que la quieran y la junten con vocales y golpes de teclado intencionados.

ondanadas de tejas

A la sombra entramada de un rojizo encadenado me deslumbra el infinito caos de una teja sobre otra, de una historia sobre otra, una palabra escondida entre la anarquía de tus tejados camuflados.

 Yo me quedo a la espera de un invierno aislado, profundo absurdo y silencio entrecortado, ondanadas de tejas en el encuadre colgado.

El tío Enrique

Retrato del tío Enrique conquistando el azar troyano que regala bienvenidas y adoración.

El total marciano de su alter ego en segundo plano aún calcula los temores de aquellos que adoramos su paciencia pesca sonriente. 
Tío enrique en la pared que nos cobija, que nos regala sombras y justicias bajo su paz tranquila y a la sombra de su sombrero.

En lo profundo de un acorde y una voz triste me acompaña un redoble caja, me entrego feliz y satisfecho, me construyo en lo que fluye de mi pensamiento acompasado con el tran tran de una mirada pintada.

haciendo esquinas

Al agarrar el peso que me tiembla en el pulso he sentido el vacío leve de un instante condecorado por mis generales ejércitos de gato panzarriba, arañando al fuerte rebelde que me gobierna.
El resabiado incautador de propiedades se tambalea entre el deber y el balanceo de una cabeza indiferente. Garante de huelgas y presencias infinitas en mi circulo social más cercano, me chirría el sofá que aguanta el trance del musicón y el respirar fumar acompasado...

Pasillo cocina

Alargado enrojecido el profundo encuadre en la cocina. Desertora ausencia la luz que corona el suelo predispuesto a que un alguien entre para hacer el café o rellenar la nevera. Cocina Troyana llena de métodos y tareas pendientes a repartir entre voluntarios o devotos. Joroba la calina que entra acalorando y quema desde el patio interior de las fincas de Cervantes, so que espera que corra el aire...

El corner de Troya

A la esquina troyana siempre iba y le añadía un detalle a cada estante, entre tanto, iba compartiendo noches juguetonas entre nosotros los interpretes, los elegidos.
Alrededor de la luz de obra naranja de agotada pila, se acumulaban los sombreros que coleccionaba por el fondo esquinero, entre los juegos de azar y una plancha de adorno ochentera.
La esquina mueble de Troya ha guardado a montones los recuerdos de mil fiestas.
Objetos significativamente inservibles que se confunden entre juegos testigos de una amistad infinita y trozos de una vida conquistada por "la Tabla y la Piedra". En aquellos años, en aquel lugar.
Amigos y hermanos escribiendo la leyenda Troyana de un piso compartido, escribiendo juntos a la salida de un corner los mejores años de una vida que siempre querrá rematar a gol.
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Sol que redobla por la ventana

Coraje rezagado que deja pasar el tempo y se espera animoso a que se suelte y baile con el compás que le haga brillar luminoso a muerte y entre de blanco por la ventana.
Jugueteando con la devoradora de gotas que sudan por las sienes dobles y chorrean a contra pelo en la parte de la boca que sonríe y hace balsa carne, se termina por morir y renace en una deslumbrante humedad que transpira toda la estancia ...

Horizonte a contraviento

En el profundo aire que me despeina proyecto una sonrisa resabiada, y no no! no calienta igual, el sol! bajo nuestros pies!
Me enfoco hacia el profundo mar de fondo, esperando encontrar en el flotar de esta sensación libertaria que me colma el dejarme llevar.
Dando piedra al suelo, a cada paso tarareado le recorto el fondo que me hace pensar, y no no! no nací para ver a Camarón, pero veo a Josele de rojo enfocado en mi horizonte, de este mi tiempo, y observo como aprecia la corbata de su tiempo de enemigo.

apaisadas

Bajo el azul oscuro enramado tirabais de pose espontánea, cómplices y sabedoras de ser parte de una postal conquistada por propia voluntad. Escapistas de salón, inocentes mujercitas recatadas de perfil ante la foto que os atrapa en un mientras tanto.